miércoles, noviembre 05, 2008

MALOS TIEMPOS

MALOS TIEMPOS
Ya acabó el mes de octubre, y menos mal. En todos los aspectos ha sido un mes bastante malo.

Comenzó el mes con el diagnóstico de dos hernias cervicales que era lo que me traía desde julio con dolores de espalda sin parar. Por tanto a la resonancia magnética que las detectó han seguido varias pruebas más para descartar patologías asociadas.

Para mejorar mis dolores me han prescrito rehabilitación acuática ya que con las treinta convencionales que había hecho no mejoraba, así que todas lasa mañanas tempranito me enfundo en mi bañador y a la piscina ha hacer mis ejercicios. Lo mejor de la sesión los estiramientos mientras flotas en el agua y el recorrido por los chorros del spa para acabar. Luego una ducha en medio de la marabunta de mujeres que se reunen el el vestuario y de nuevo a casa a preparar la comida y coser un ratito hasta la hora de comer.


Lo peor del caso es que cuando esto ya estaba empezando a controlarse, la verdad es que de la espalda estoy bastante mejor; me levanto una mañana con unas molestias en el ojo izquierdo, cada vez que pestañeo por delante de él vuelan puntos y rayas bastante molestos sobre todo a la hora de fijar la vista para leer o coser.

Como pasa un par de días y esto no mejoraba llamo a mi oculista le cuento lo que pasa y me dice que pase por su consulta en ocho días. Yo que soy una novelera y que uno oye cosas hago una búsqueda en Internet y me preocupo bastante ya que los síntomas pueden deberse a un desprendimiento de retina. Me planto en urgencias y me cuentan que la retina está bien pero que se ha desprendido el humor vítreo y que me van a hacer un seguimiento para descartar un posible desprendimiento de retina.

Afortunadamente no ha sido así aunque voy a seguir viendo las rayas y los puntos casi a perpetuidad, porque, aunque podría eliminarse con una vitectromía, las secuelas pueden ser peor que lo que tengo ahora, así que, por lo pronto, me aguantaré con lo que hay.
Osea que parezco María Pupas.

Para colmo de males le adelantaron la ida a Cabo Verde a Silvia y me he pasado una semana con la lágrima puesta porque mi hijita ha volado del nido a vivir su vida y eso es lo de menos, lo de más, es lo lejos que se ha ido. Pero, en fin, es ley de vida que los hijos acaben haciendo la suya, yo lo hice en mi momento y ahora le toca a ella. Por lo pronto me queda Eduardo que como me ve tan triste está como más pendiente de mi.

Este el lugar donde va a vivir, por lo que se ve y lo que me ha contado yo lo imagino como aquí hace treinta o mejor cuarenta años, calles adoquinadas y solo modernidad en los alrededores de los hotes donde va el turismo.

Ya me mandará fotos de la casa donde vive y del lugar donde trabaja. Por lo pronto hablo con ella dos veces en semana, y me cuenta que está contenta. Eso es lo importante.

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